Opinión | Así no se despide a un capitán

Se acabó la etapa de Miguel Ángel Cordero en el FC Cartagena. Tres temporadas y media en las que ha defendido la elástica del Efesé en 97 ocasiones, pero su ciclo en la ciudad trimilenaria se ha acabado.

Y finaliza de la peor forma posible. El de Lebrija se va sin haber tenido una oportunidad en Segunda División y sin una despedida acorde a lo que se merece por su entrega y cariño a este club.

La oportunidad en LaLiga Smartbank no ha llegado por culpa de Borja Jiménez, o quizás la orden venía de arriba… No lo sé, lo que sí sé es que nunca sabremos si Cordero era válido para la categoría de plata porque nunca dejaron que lo demostrara. Le han arrancado el sueño por el que venía luchando desde que llegó en agosto de 2017. Quizás no hubiera dado el nivel, pero ya que no se marchó en el mercado de verano, se le tenía que haber dado su opción de demostrar si era válido o no para la categoría de plata.

Muchos pensarán que no da el nivel y que las cosas irían igual o peor con él en el campo, pero lo cierto es que hay ejemplos de jugadores que supuestamente ´´no valían´´ y ahora son titulares. Elady, Jurado y Carlos David son 3 buenos ejemplos de ello. Es verdad que, para mí, la temporada pasada Cordero no estuvo a su mejor nivel en Segunda B, pero perfectamente le podía haber dado la vuelta a su situación esta temporada como han hecho algunos de sus compañeros. Pero el caso es que nunca se sabrá. Deja Cartagena con la espina clavada de haber visto como el resto de sus compañeros sí tenían oportunidades mientras que a él no se le daba ni una.

Y por otro lado, abandona la ciudad trimilenaria con una despedida que ni mucho menos está a la altura de lo que él ha hecho en el club durante los últimos 3 años y medio. Un comunicado oficial y un mensaje de 3 líneas del presidente en Twitter es algo insuficiente para decirle adiós a un símbolo del equipo durante las últimas temporadas. Recordemos que Cordero era el único superviviente de las derrotas ante el Majadahonda y el Extremadura de aquella temporada 2017-2018.

Alguien que ha llorado y luchado por este escudo desde el principio hasta el final no se merece esta triste despedida. En algunos partidos habrá tenido mejor rendimiento que en otros, habrá sido un jugador tarjetero, pero de lo que nunca se podrá dudar es de su esfuerzo. Lo ha dejado todo en el campo y el club no lo ha dejado todo en su despedida.

Es verdad que en tiempos de pandemia todo es más difícil, pero hay muchas maneras de brindarle a Miguel Ángel el adiós que se merece: una rueda de prensa, un vídeo de despedida o incluso, dedicarle el cartel del partido ante el Real Zaragoza. Pensaba que sería distinto, que el club estaría a la altura, pero parece que todo se quedará en un comunicado oficial y un mensaje del presidente en Twitter. Sin duda, una cutre y triste despedida al capitán del ascenso en Málaga.

El capitán se va, y deja un vacío en el vestuario, algo palpable en cada despedida de sus ya excompañeros en redes sociales. Y también deja un vacío en la afición, porque, más allá de alguna polémica puntual, la conexión de su familia con los aficionados cartageneristas ha sido espectacular.

Y ahora era el turno del club, pero no ha estado a la altura en su despedida. Así no se despide a un capitán.

Imagen principal: Andy Céspesdes (FC Cartagena)