Los cinco grandes problemas que tendrá que resolver el Cartagena en la segunda vuelta

15 puntos en 10 jornadas, para posteriormente sacar solamente 5 en las 11 jornadas siguientes. Así ha sido la primera vuelta del Cartagena. Parecía que se podía soñar con estar cerca de los playoff de ascenso, pero finalmente el Efesé ha acabado la primera parte del campeonato liguero metido en una profunda crisis que ha provocado el cambio de entrenador hasta en 2 ocasiones, algo nunca antes visto en la era de Paco Belmonte en la ciudad trimilenaria. Una cuesta abajo y sin frenos iniciada en noviembre, y que todavía perdura. Una cuesta abajo provocada por 5 grandes errores, 5 ´pecados´ que han llevado al Cartagena a desinflarse en la clasificación hasta el punto de pisar los puestos de descenso:

1. Fragilidad defensiva: este error es el más claro y evidente. Ser el equipo más goleado de la categoría de plata no es una casualidad, es un indicio de que las cosas se están haciendo muy mal en las tareas defensivas. Desde la delantera hasta el portero, nadie se salva. Todos en mayor o menor medida han contribuido a que el cuadro blanquinegro haya encajado 31 goles hasta la fecha. Se inicia mal una acción defensiva cuando no se presiona la salida del balón arriba, que es algo que casi nunca hace el Efesé, se continúa peor cuando las líneas están separadas y con mucho espacio para que los delanteros campen a sus anchas, y la verbena defensiva se termina de rematar cuando los defensores cometen múltiples errores más propios de alevines que de unos futbolistas que se encuentran en el fútbol profesional. Este es el resumen de la parcela defensiva del Cartagena: un desastre se mire por donde se mire. En la línea defensiva ninguno de los futbolistas que han tenido minutos han terminado de cuajar y rendir a un nivel óptimo. Quizás los únicos que se salvan -en algunos partidos- son De la Bella, David Simón y Marc Martínez. Pero hasta ellos han tenido fallos garrafales y días para olvidar. El resto de los defensas no llegan al aprobado en la primera vuelta.

2. Centro del campo falto de ideas: el Cartagena no tiene un timón en el centro del campo, un jugador que lleve la manija del equipo. Es decir, falta un mediocentro organizador. En teoría, ese era el papel que podían desempeñar Aguza, Clavería, Verza, Lozano o, incluso Carrasquilla. Pero nada, ninguno ha sido    capaz de coger la batuta y poner orden en el juego del Cartagena. Eso ha provocado que el Cartagena se convirtiera en un equipo previsible, con muchos pases en horizontal pero sin apenas movimientos en vertical. Y a esto hay que sumarle las escasas ayudas en defensa. Jurado ha sido el único que ha cumplido con el papel de pivote defensivo, pero claro, no lo puede jugar todo. Bien por lesión o bien por sanción hay días en los que no ha podido estar, el equipo se ha partido por completo.

3. Fondo de armario escaso: El 11 inicial, nombre por nombre, no era nada malo. Pero cuando salían las alineaciones, en la mayoría de partidos mirar al banquillo era un suplicio. O por falta de confianza o por falta de calidad, o por las dos cosas, el cuadro cartagenero no ha tenido un revulsivo en el banquillo. Es decir, no ha tenido a ningún jugador capaz de salir en la segunda parte y revolucionar el partido. Los cambios que se hacían no aportaban casi nada. Quizás el que más se atrevía y buscaba la portería rival era Berto Cayarga, al único que se le puede salvar de ese fondo de armario que ha tenido el Cartagena en la primera vuelta.  Prueba de la falta de revulsivos es las numerosas salidas que están habiendo en este mercado de invierno. Todas las bajas que se han producido hasta el momento (Sergio Lozano, Cordero, Verza, Aguza, William y Rhyner) son jugadores que apenas han sido titulares. Además de la descompensación entre el buen ataque y la mala defensa, la plantilla también ha estado descompensada al hacer la comparativa entre jugadores teóricamente titulares y futbolistas teóricamente suplentes. Al margen de salidas y refuerzos, Luis Carrión en este aspecto podría tener un papel fundamental a la hora de solucionar esta papeleta. Veremos si consigue recuperar un rendimiento óptimo de algunos jugadores que han decepcionado en esta primera mitad de liga.

4. Estado físico de los jugadores: las fuerzas han flaqueado en el tramo final de los encuentros. Eso se ve a las primeras de cambio cuando uno mira las estadísticas y ve que la mayoría de goles encajados han sido en el tramo final de los encuentros. Las mayoría de las segundas partes han sido catastróficas, en gran parte, por el agotamiento que llevaban muchos futbolistas, algo que ha venido provocado por la cantidad de minutos que han acumulado en sus piernas. De la Bella, Andújar, David Simón o Nacho Gil son claros ejemplos de ese agotamiento. Casi no han tenido descanso, y en el tramo final de esta primera vuelta se les notaba como llegaban fundidos a los últimos 20-25 minutos de los partidos.

5. Estado anímico de la plantilla: un equipo que no es un bloque unido y que mentalmente es tan débil, a pocos sitios puede llegar. En muchos tramos de los encuentros se ha notado que el Cartagena ha sido un equipo sin alma y sin capacidad de reacción. Muchas han sido las veces que tras encajar un gol el equipo se ha venido abajo, o se han encajado varios goles en apenas 5-10 minutos, o no se ha sabido gestionar un 1-0 a favor. Y la imagen que deja en evidencia este problema se pudo ver en Tenerife. Un Cartagena que tras encajar cada gol se mantenía perplejo, sin un grito, sin un cabreo, sin apenas reacción. Un equipo al que le estaban pasando por encima en el Heliodoro Rodríguez López y que se veía impotente ante la situación. Esto podría ser distinto si se tuviera un líder en el vestuario, alguien como fue Mariano Sánchez en su época. Pero ahora no hay nadie capaz de pegar 4 gritos y espabilar a sus compañeros. Quizás con Cordero ese líder estaba, pero prefirieron darle la baja antes que una oportunidad en Segunda División.

 

En definitiva, Luis Carrión y los futbolistas (los que están y los que quedan por venir) tienen trabajo por delante. Estos son los 5 grandes problemas a los que tendrán que darle solución si quieren mantener la categoría. Al Cartagena le ha costado 8 años volver al fútbol profesional, y toca cambiar por completo la dinámica para no acabar tirando por la borda muchos años de trabajo y sufrimiento, además de provocar una gran tristeza, rabia y desolación en la afición, al ver como volverían al Cartagonova para presenciar fútbol de la misma categoría que cuando abandonaron su butaca en marzo de 2020.

 

Imagen principal: Andy Céspedes (FC Cartagena)

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